Hoy Good Boy. Película independiente de 2025, que Ben Leonberg escribe y dirige y además, dueño del protagonista, Indy, un retriver escoces con tremendo carisma. Y sin entrenamiento de perro-actor.
Las acciones se centran en Indy y Todd. Que llegan a vivir a una viaja casa de campo donde una entidad empieza a aparecer para amenazar las paz de los dos amigos mientras Indy, percibe cosas aún más aterradoras.
Si bien la historia, de inicio, parece no abonar mucho al género, el mérito mayor se encuentra en la producción y la perspectiva de la misma.
Tomas y secuencias colocadas a la altura y con los movimientos propios de un perro, por ejemplo deja en claro quien es el protagonista. La ausencia casi total de rostros humanos permite percibir de mejor manera la perspectiva del perro y la forma de filmar. Donde al no ser un animal entrenado se llevaron tres años en tener materia suficiente para componer la película. El director y su esposa fungiendo como dobles para conseguir el efecto deseado en el protagonista y una historia de amor perruno y espanto.
Un film que deberá convertirse en película de culto por las incorporaciones técnicas y de producción en la realización.
GoodBoy es, en conclusión, la puerta hacia una nueva forma de hacer cine. Con paciencia y corazón.
Hasta próximos ladridos.

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