2024/07/28

¿Por que me gusta el terror... ?

La crueldad es intrínseca a los niños. Nadie lastima como ellos, nadie puede hacerlo mejor.  

La niños en todos los países son especialistas en infringir daño y en ser los primeros filtros sociales. Pero ¿de dónde sacamos ese cuchillo ardiente ?

Saludos y buenos recorridos dos cósmicos. El gusto por el terror puede estar depositado desde nuestros primeros contactos con una historia. 







I

Un pequeño asustado... Mientras es perseguido, él y su madre intentan escapar. El cazador no es más veloz pero si más astuto y cuando están a punto de escapar. Un disparo termina con la vida de la madre. 

La casa que Jack construyó

Aunque Bambi  tiene una escena muy parecida. 

II

Una chica va a visitar a su abuela enferma y lleva viandas y medicinas sin embargo al llegar alguien a irrumpido en la casa de la anciana mujer e intenta engañar a la joven para atacarla, después de haber matado a la vieja y apunto de perpetrar un horrible crimen contra la jovencita el invasor es muerto por un leñador. 

III

Una niña sale a vender fósforos en la noche terriblemente fría de navidad en Coppenhage y con el recuerdo de su madre y las cerillas a punto de acabarse muere en la puerta de su casa ya que su padre, ebrio, no escucha el llamado a la puerta. 

IV

Un padre preocupado por la hambruna lleva a sus hijos para evitar comerlos en un ataque de canibalismo. O acaso tiene un pacto con una bruja que puede dotar de alimento a todo el pueblo,  quedan en el bosque. Dónde la bruja los encuentra y pretende alimentarse de ellos. Pero son ellos los que asesinan a la mujer metiendo la en un horno. 

V

En un pueblo el vigía da falsas alarmas y cuando el lobo llega se lo devora a él y a todos en el pueblo. 


Brujas, ogros, bestias, monstruos, muertes, maldiciones desapariciones, cosas atroces, injusticias... Dosificado desde mi infancia. 

Sin duda la intensión de un cuánto infantil era aleccionar, preveer y condicionar algunos comportamientos en los más jovenes. Por eso no nos extrañe que ahora estén de vuelta ñ para buscar me te eres en nuestras pesadillas. 

Amo las historias infantiles. 





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