Buenos recorridos cosmicos. Orlok, es el hermano del vampiro más famoso de la historia. Todo empieza por allá en 1922 cuando se estrena Nosferatu: Sinfonía de horror de Friedrich Wilhelm Murnau.
Está obra del cine mudo es una adaptación a la novela de Stoker publicada en 1897. Sin embargo no fue aceptada y casi desaparecida por la esposa del escritor.
Sin embargo se las arreglo para sobrevivir y presentarnos una película y una historia que pretende alejarse de la obra que le dió origen. Con algunas diferencias muy claras el conde Orlok esconde en la oscuridad su terrible aspecto mientras que el conde Drácula se pasea por Picadilly circus buscando a su amada.
Con finales diferentes y que parten de una base narrativa similar y la película se conduce por una narrativa gótica alemana es un ejemplo del expresionismo alemán de inicio de siglo. Y aporta elementos importantes como la muerte con la luz al mito vampírico, convirtiendose en la referencia inmediata del mito.
Existieron otras películas de vampiros sin embargo todas ellas se recargan en la estética irlandesa del vampiro aristocrático. El mejor ejemplo la adaptación de Coppola en 1997. Con un Gary Oldman monumental.
Así Orlok se convierte en el hermano feo del vampirismo, el portador de la plaga, es rural, poco sutil y bestial. Es la parte balcánica y terrible de un mito. No hay seducción en la destrucción y en la oscuridad. Solo muerte oscuridad y la sombra que cubre una ciudad que perderá la claridad del día y la conciencia. Uno de los vampiros iniciales, antedilivianos quizá, en la negada tradición teutona. Sin los adornos victorianos. El poder oscuro y total.
En la nueva versión. Nosferatu (2024) Eggert nos da un Orlak regenerado o mejor dicho más degenerado, más bestial y más primigenio. Más elemental e instintivo. Y su conexión con el mundo humano más terrenal y menos romántica. Más práctica sin pasar por alto la importancia de los instintos. Personajes aunque arquetipicos buscan alejarse lo más posible del referente inmediato. Y creo que lo consiguen.
En lo personal una muy buena transición sin perder de vista que Orlok no es Vlad Tepes, ni Drácula. Ni el conde Duval. Es un vampiro único. Nosferatu deja de ser la sombra de Vlad para ser la sombra de la peste.
Hasta próximos recorridos solares. Siempre y cuando el sol no los destruya.
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