2024/02/23

Mad max. El futuro se acerca

-Si estoy aquí es solo por la gasolina.-


Quien lo diría, en la iniciante década de los ochentas una película se coló entre las beta de mi padre. La triste historia de un policía que ve morir a su familia en una persecución de carreta. Y en venganza busca a todos esos causantes para llevarlos a la justicia... La justicia divina. Se volvió una de las franquicias mejor tratadas en los últimos tiempos. 

Mad max de George Miller, película australiana de 1979 (que gran años para llegar al mundo, puras cosas de calidad) protagonizada por Mel Gibson y que en los años recientes ha sido desenterrada de las arenas australianas. Un gran ejemplo de Road movie. Esas películas de viajes, carreteras y crecimiento.

Con un montón de cosas que mencionar... 

La estética. Desértica, árida y vertiginosa. Con carreteras sin fin. Sin semáforos y sin casas a los lados, solo conducir como demonios en millas y millas de asfalto. Con algo aproximado al dieselpunk y al Salvegepunk. Dónde la cultura se genera a partir de reciclados de culturas previas y dónde las máquinas impulsadas por combustión interna son de mayúscula en importancia. El sonido de las máquina, los ruidos estridentes y los personajes estrafalarios hacen de las cintas un verdadero deleite.

El desarrollo, en el caso de la primera película es un Road movie, sin embargo en las siguientes si hay una modificación al desarrollo, y una evolución al personaje que, creo, se mantiene incluso en la cuarta entrega. Con un Max que ha perdido no solo la cordura sino la esperanza. "La esperanza es un error... Si no puedes arreglar lo que está roto, te volveras loco." La perdida de autoridad, la caída del sistema, perdida de humanidad en retazos reconocí les del mundo actual. 

La historia. Empieza con un policía y su venganza personal pero los problemas mundiales lo superan y en cada Aúna de las películas queda la impresión de que solo es una de las batallas que se libran en uno de los muchos lugares del mundo. 

El trasfondo. Guerra del petróleo, guerra nuclear, el cadáver de un mundo viejo destruido. Y en el cual se aferran a la existencia los últimos pobladores, antes de que el nuevo orden borre sus huellas. 

Tiene, además, un paulatino cambio. No es una franquicia que pretenda continuar con la misma fórmula, por el contrario cada película aporta datos a una mitología/leyenda dejando entre ver el contexto. Sobre todo local ya que el mundial es poco o nada importante. Siendo una obra con alto eclecticismo. 

La religión, o más bien secta, en Furia en el camino, es el ejemplo del mismo, mencionando el Valhala mezclando lo con términos nuevos como " nunca había hecho algo tan cromado" un gran NOVUM que le da sentido a la ciencia ficción en ella.  Una de las virtudes de la saga es que cada película ha Sido diferente a la anterior generando una espectativa interesante.  

"Locura máxima" o Max Loco . Es una saga que está enseñando como ocurre el cambio generacional y necesario dando la estafeta a Furia y dejando a un viejo y cada vez más loco Max.

Veremos qué nos depara el destino. 

Gracias. Hasta próximos ciclos solares. 



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